El Gobierno decidió que habrá un nuevo aumento de tarifas de luz y gas en agosto, que tendrá un techo de 4% de impacto final a los usuarios.
También autorizó una suba de los combustibles, que incorporará parte del alza pendiente de impuestos a la nafta y el gasoil.
El acuerdo con el Fondo Monetario Internacional establecía que habría nuevos incrementos de tarifas en agosto, al menos para llevar los subsidios a la energía hasta el equivalente a 0,7% del Producto Interno Bruto (PIB), partiendo de 1,6% en 2023. Sería un ajuste cercano a los U$S 5.000 millones.
No obstante, en esta ocasión también se podría habilitar una actualización del Valor Agregado de la Distribución (VAD), los márgenes que cobran firmas como Edenor, Edesur, Transener, TGS, TGN, Metrogas, Naturgy y Camuzzi, entre otras.
La última vez que hubo aumentos para este tramo fue en febrero (energía eléctrica) y abril (gas natural). Con eso, las compañías volvieron a tener balances positivos y la expectativa de que a fin de año tendrán un panorama cierto sobre las tarifas, costos e inversiones por los próximos 5 años.
Sin embargo, generó incertidumbre en ambos sectores que la normativa preveía subas mensuales en función de la evolución de la inflación y los salarios, que fueron frenadas sucesivamente entre mayo y julio.
Con todo, y como siempre, lo que pasará en agosto es un incremento adicional a los que ya están anunciados e implementados, y que se están viendo en las facturas de los usuarios por estos días.
Tras los aumentos de tarifas y el alza de consumo energético por la ola polar, las boletas llegan a los hogares con valores que se multiplican por 9 (800%) o más respecto al mismo período del año pasado.
Puntualmente en Salta con la suba autorizada del 2.5 por ciento, el litro de nafta ya superó los 1000 pesos.
Los nuevos precios:
Nafta súper $1066.
Infinia $1283
Diesel 500 $11… Contenido copiado de defrentesalta.com.ar